No al genocidio israelí contra el pueblo palestino
La embestida desatada, a partir del 7 de octubre del pasado año, por parte de Israel contra el pueblo palestino pone a prueba la sensibilidad humana del mundo y derriba las caretas de gobiernos que como los de occidente, y en especial el de los Estados Unidos, se consideran los paladines de la libertad y de los Derechos Humanos.
Los crímenes de todas índoles cometidos en la Franja de Gaza, Cisjordania y en otras zonas palestinas, en pleno siglo XXI, constituye un crimen de lesa humanidad, un genocidio.
En cuatro meses de exterminio, el gobierno sionista de Israel ha provocado la muerte a más de 27, 800 personas, la mayoría civiles, en especial, mujeres y niños; de hecho, 6 niños mueren en Gaza cada hora; entre 7,000 a 8,000 desaparecidos, sepultados bajo los escombros; más de 115 periodistas asesinados, 70 mil viviendas destruidas y otras 290 mil con graves daños, lo que significa que más de medio millón de seres humanos no cuenta con un techo al cual regresar; pero no solo las viviendas han sido afectadas, sino también los hospitales, pues de los 36 existentes en la Franja de Gaza, 23 han sido destruidos; asimismo, más de 100 escuelas han sufrido daños de importancia; más de 28 mil proyectiles lanzados. Podría decirse que la infraestructura de Gaza ha quedado reducida a escombros, con miles de municiones y proyectiles sin detonar esparcidos por todas partes. Y se ha cometido además el gran crimen de retirar el suministro de luz, de agua y hasta el de la alimentación.
Aun aquellas casas que permanecen en pie no pueden calificarse como aptas para ser habitadas. Esta situación ha generado brotes masivos de enfermedades, en especial aquellas de tipos gastrointestinales y respiratorias. Según la Organización mundial de la Salud, podrían morir más personas en Gaza a causa de enfermedades que por el criminal bombardeo de Israel.
Sin dudas, esta zona de elevada densidad poblacional constituye una verdadera cárcel a cielo abierto, repleta de cadáveres, destruida y arruinada, en la que los sobrevivientes a este genocidio despavoridamente buscan lugares de refugios, conscientes de que en esta travesía las posibilidades de encontrarse con la muerte son mucho mayores a las de sobrevivir.
Israel asume el derecho de reclamar indemnización por sus infraestructuras destruidas, sin embargo, a lo largo de toda la historia, y desoyendo, inclusive, medidas de la ONU y de otros organismos internacionales, se lo niega a los palestinos.
Y claro, que en medio de toda esta barbarie se hallan las manos criminales, metidas hasta los tuétanos, de los gobiernos imperialistas, en los campos económico, político y militar. Sí, tanto el imperialismo norteamericano como los imperialistas de la Unión Europea maniobran, ya no desde la sombra, sino de manera abierta, a favor del exterminio en la Franja de gaza.
Es bueno que el mundo sepa que lo que se vive en Palestina no es una guerra, sino un abierto genocidio contra una población que resiste y se niega a abandonar su territorio. Las pretensiones del gobierno de Israel son las de un exterminio total, lo que pone de manifiesto una vez más su carácter criminal y genocida; negándose permanentemente a reconocer el derecho que le asiste a Palestina de vivir bajo soberanía plena, en paz y en libertad.
Por todo ello, laICOR Américalanza un ferviente llamado a todas las organizaciones y pueblos del mundo a no guardar silencio y condenar el criminal genocidio del gobierno sionista de Israel sobre el pueblo palestino. A unirnos en amplias jornadas de luchas contra las fuerzas imperialistas promotoras de guerras que amenazan no solo la paz del mundo, sino la existencia de la raza humana.
Hoy más que nunca se debe intensificar la lucha de los trabajadores del mundo contra la explotación ejercida por los capitalistas, pues solo la victoria del proletariado, con el establecimiento del socialismo, garantiza la paz y la soberanía de los pueblos.
¡Libertad para los presos políticos palestinos, de América y del mundo!
¡No a las maniobras criminales de las fuerzas imperialistas!
¡Viva la autodeterminación de los pueblos!
¡Viva Palestina Libre!
¡No al genocidio del Estado sionista de Israel contra el pueblo palestino!