Las alianzas de Trump
I
Unos meses atrás muchas personas pensaban que la política de alianzas de los Estados Unidos luego del ascenso de Trump a la presidencia había cambiado por completo. No tenían en cuenta que los cambios que se producen en la sociedad como en todos los aspectos de la naturaleza no son repentinos, se desarrollan sobre la base de contradicciones relacionadas con la naturaleza misma de las cosas que pueden durar mucho tiempo.
De forma similar en el Paraguay la estructura semi colonial y semifeudal trae aparejada el tipo de gobierno y las características personales de sus componentes
Algunos cambios que comenzaron a producirse se atribuyen a factores de tipo personal, subjetivos, y a la búsqueda de liderazgo diferente de los gobiernos anteriores, bajo la consigna “Estados Unidos volverá a ser grande”. Es cierto que la “caradurez” casi brutal de sus expresiones, la “variabilidad de carácter” del nuevo mandatario presentadas como rasgos de “sinceridad” han influido en esta interpretación. De hecho hay una coincidencia entre los aspectos personales señalados, en apariencia unilaterales y arbitrarios, con la evolución de la profunda crisis de la economía capitalista de los monopolios financieros en todo el mundo y en especial en Norteamérica desde antes de la Primera Guerra Mundial que tomó un carácter público desde los comienzos de este siglo con la superproducción de bienes, la competencia y el fracaso de la devolución de los préstamos hipotecarios sobre las productivas granjas familiares (de la política capitalista del “Home Stead”= “establecimientos familiares”).
1. En esta situación de crisis interminable, públicamente admitida en todas partes y cada vez más evidente los monopolios imperialistas utilizan con fuerza creciente el método de confundir a los pueblos para ocultar la realidad existente en el sentido explicado por Lenin en su famoso libro escrito en 1917 “El imperialismo fase superior del capitalismo” respecto a los monopolios capitalistas financieros. Las clases dominantes del sistema capitalista-imperialista no consiguen “equilibrar” sus economías a pesar de las legiones de expertos controladores, debido a la gran competencia entre los monopolios y al parasitismo de los inversores en “bonos”, sobre los intereses generados por estos préstamos, siempre dirigidos hacia compras de productos industriales que los grandes capitalistas imponen como condición de los préstamos. El uso de sistemas digitales que día a día son superados por otros nuevos entre ellos la mal llamada IA (“inteligencia artificial” utilizada para la elaboración de los “Bitcoins” = moneda virtual informática) que es la acumulación de informaciones que toda la humanidad viene haciendo respecto de la tecnología sobre la base de la producción, del desarrollo económico.
Su objetivo es el de ocultar la realidad de que las enormes ganancias acumuladas provienen de los intereses de los préstamos, de la explotación sistemática de las grandes masas proletarias del mundo entero (con el control sistemático de las monedas, de las transacciones locales e internacionales, de los bancos e interferencias en el comercio mundial para el control del mundo entero por un puñado de magnates y sus agentes). Todos estos aspectos están en crisis, en decadencia, en este ambiente surgió el nuevo presidente de Estados unidos.
2. Hay varios aspectos sobre los que conviene prestar atención en relación con la crisis general del capitalismo monopolista financiero o imperialismo mencionado y al mismo tiempo las “nuevas” alianzas que se establecen En todas las guerras que se desarrollan en Ucrania, en todo el Medio Oriente. En forma inevitable intervienen en forma contradictoria las grandes potencias (Norteamérica, Rusia, etc) para conservar y conquistar nuevos territorios para la dominación política de los países, de esta forma les sacan el contenido a las luchas por su liberación nacional tales como en Ucrania, Siria, el Kurdistán, Yemen ... las convierten en guerras injustas, los pueblos son utilizados como “carne de cañón” de intereses económicos y políticos.
3. En el plano político el estímulo a las tendencias llamadas “populistas” (en El Salvador, Argentina, Ecuador, etc.) con mentiras a los pueblos sobre falsas recuperaciones económicas en lucha contra la inflación generalizada, la recuperación es de muy corto alcance ya que es producida por la insuficiencia de producción producto en su mayor parte del monopolio de las tierras por las clases capitalistas semifeudales. Reemplazan la necesidad de mayor producción y tratan el desorden insuperable y la competencia en la producción capitalista solo con el “equilibrio fiscal”, además de la suba de impuestos, las alzas de tasas de interés, devaluación constante de las monedas, con lo que rebajan los gastos de los Estados nacionales y recortan a la vez el poder adquisitivo de las masas. En cambio agrandan las ganancias de los monopolios capitalistas que compran tierras e insumos industriales por menos dinero. Este “populismo” se esconde detrás de la “lucha” contra la corrupción, que es utilizada en forma mentirosa por los agentes de los monopolios; estos al no poder cobrar puntualmente los intereses de los préstamos utilizan al FMI, al Banco Mundial, y a otros bancos monopólicos para exigir a los gobiernos medidas para recaudar más en dos direcciones: rematan bienes de la nación, devalúan la moneda corriente y al mismo tiempo el cobro compulsivo de impuestos y servicios.
4. Sectores que se hacen llamar de “izquierda” y en otros casos “nacionalistas” han contribuido eficazmente para salvar los intereses de los grandes capitales imperialistas. Estos sectores que son los agentes pagados de las grandes potencias incurren en fenomenales desfalcos, robos y aprovechamientos en las obras públicas a través de empresas de tipo monopólico. (Itaipú, Yasyreta, Petrobrás, Techint y otras.)
El resultado directo es que surgen gobiernos con el propósito engañoso de terminar en apariencia con la corrupción e imprimen métodos de tipo nazi-fascista represores, forman partidos políticos anti democráticos bajo el control del imperialismo norteamericano y de otras formaciones imperialistas de rusos, chinos y europeos.
El Paraguay se ha convertido en un “ejemplo” antiguo (desde la guerra de 1864 a 1870 y después de 1936) y ya no tan silencioso como quisieran los enemigos de nuestra nación de esta política imperialista de Estados Unidos, del Brasil y de Argentina.
5. El cambio “aparente” del gobierno de Trump en su relación con la India y el Brasil está vinculado a la política de conciliación a la que la llaman de “coexistencia pacífica” con Moscú y con Pekin. India y Brasil, además de que sus políticas son subalternas de las potencias mayores de capitales monopolistas financieros mencionadas dominan a otros países más pobres y compran grandes cantidades de petróleo de Rusia, se oponen en este sentido a la decisión de Norteamérica de impedir la venta del petróleo ruso a países europeos, asiáticos y de A. Latina, obstaculizando la expansión ruso-china sobre Europa en el curso de la guerra de dominación sobre Ucrania, para forzar la dominación de Israel sobre Siria, Afghanistán, Irán, y sobre los pueblos kurdos y facilitar la apertura de las rutas del petróleo en la región del océano Índico y del Mar Rojo. Aquí se ve que no se trata solamente de la reducción de una “arbitrariedad del Sr. Trump”, sino de una política muy antigua de los monopolios financieros norteamericanos para continuar su dominación y evitar el fantasma del colapso de la economía norteamericana acosada por la inflación y por la reducida producción económica e industrial y por lo tanto laboral.
Llama la atención la disminución drástica de las relaciones con la India en la política de Trump, –un país aliado de Rusia desde siempre – y las maniobras del ultra conservador reaccionario primer ministro indú Modi para aprovechar las fuertes inversiones de empresas norteamericanas durante los últimos años. Por otra parte, el aliento económico-militar de Estados Unidos a Pakistán enemigo tradicional de la India (Recordar la agresión al Pakistán en 1970 por la India para separar a Bangla Desh de la región occidental de Pakistán, contra China). Este aislamiento de la India y el reforzamiento con Pakistán no es algo sorprendente de Trump sino una maniobra –como se dijo– para atajar las compras de petróleo ruso en gran escala por la India y China y en su apoyo a la agresión rusa de Ucrania, y por obstaculizar la firma de una “paz” (conveniente para los monopolios de Estados Unidos y de Europa). Para tratar de atajar el avance de grupos militares en el Medio Oriente.
La reacción norteamericana contra la India además de tratar de mejorar la relación con China –antiguo rival de India– se produjo para no incentivar el ingreso de capitales norteamericanos con créditos multimillonarios a la India un aliado tradicional armado hasta los dientes por Rusia.
6. La propaganda de Trump para las elecciones en las que fue ganador se guía por la dirección de los monopolios capitalistas financieros que están detrás de las políticas para disminuir los gastos de sus activos financieros.
La política norteamericana de atesoramiento de dinero mediante “Bitcoins” seguida por Trump en gran escala forma parte importante de los esfuerzos para controlar el sistema financiero internacional herido por la debilidad del dólar. En este sentido nuestro país está siendo invadido y estructurado para la producción de esta nueva moneda, que requiere gran cantidad de energía, su utilización intensiva adelantada ya por Norteamérica compite con algunas empresas del Brasil en torno a las represas hidroeléctricas, las de uso fotovoltaico y de los grandes espejos de agua.
Es decir en la política del gobierno de Trump, que no es solo de el, sino de los monopolios financieros que controlan el gobierno de estados Unidos, no hay “precipitación” ni la arbitrariedad de un “loco”. Se trata de disminuir con maniobras de subir o bajar aranceles en el comercio mundial según los intereses de los más grandes monopolios financieros.
La relación “repentinamente” mejorada con China tiene que ver con los intentos rusos de obstruir el transporte de petróleo en Europa y Asia (de China, India y otros grandes consumidores de combustibles rusos como ya se advirtió.
Todas estas informaciones se relacionan con la ampliación de las guerras para la aplicación efectiva de la política de dominación mundial en competencia directa contra otras superpotencias en regiones muy diferentes. Esta es una característica de la época del imperialismo. El impulso del Estado de Israel en la guerra de la franja de Gaza está relacionada con el expansionismo de este Estado y de no reconocer la formación del Estado palestino; por otra parte su condición servil a la potencia norteamericana y su costumbre de golpear a los países vecinos para dominar la ruta del abastecimiento petrolero por tierra mar y aire, por el Mar Rojo y el océano Indico. Por otra parte Rusia alienta guerras raciales en otros países del África necesarias para la distribución controlada de sus productos petroleros hacia occidente hacia los oleoductos y las flotas marítimas en los mares Caspio, Tirreno y Azov. Distribución atrasada por la guerra en Ucrania. (Ver el bombardeo criminal sobre el pueblo de Yemen por el vasallo de Estados Unidos el Estado de Israel el 12 de setiembre).
7. Lo que aparece en Trump como algo “irracional” en su relación por cierto enfrentamiento con el Estado brasilero se debe a la relación de empresas monopólicas del Brasil con Rusia en el BRICS (alianza petrolera de Brasil, India, China y Sudáfrica) en la distribución de petróleo, además con Venezuela y otros países latinoamericanos, por no seguir con las directivas de Trump que se esfuerzan por castigar a Rusia y Venezuela, con restricciones para la compra y distribución petrolera. Por otra parte el Brasil trata de convertirse en potencia en A. Latina, aún siendo un país dependiente de Estados Unidos. El Estado del Brasil a punta de fusil bajo la dirección “nacionalista” –cuando le conviene– de la “Scola da Güerra” y a las clases sociales de capitalistas ejerce la dominación completa sobre el Estado paraguayo, de su economía que se refleja en el tratado secreto antinacional de Itaipú y de otros tratados en particular en la cuestión hidrográfica.
8. La era actual
No se debe olvidar sobre el largo tiempo para la humanidad -–toda una Era– en la que se desarrollan procesos diversos, el principal sigue siendo el mismo desde los comienzos – la economía – desde que la organización social de los primeros seres humanos adquirió conciencia luego de muchos milenios de mejorar su tecnología de producción.
La actual es una etapa de revolución en la que se enfrentan clases sociales: el proletariado mundial, la clase mayoritaria, acompañada por otras clases populares, contra la clase de los capitalistas, contra –el de los monopolios capitalistas financieros. En estas luchas el papel de los individuos está condicionado por la marcha de cada una de las clases sociales que se enfrentan.
La inteligencia colectiva de las clases proletarias tiene una dirección detallada profunda y acertada en el socialismo científico creado por Marx, Engels y Lenin.
Así también las clases del capitalismo monopolista financiero, tanto del privado como del estatal, que se impone a todos los pueblos, utilizan un arsenal de ideas y de fuerzas para luchar contra el proletariado aunque están en decadencia.
La experiencia de las grandes masas de los desposeídos, del proletariado y de sus aliados en todo el mundo avanza sin pausa en sus luchas por derrotar a la clase capitalista, al imperialismo capitalista en grave crisis, este produce las guerras injustas que todos conocemos, en conjunto con el revisionismo oportunista.
II
SOBRE LOS ENGAÑOS PARA ESCONDER LAS MANIOBRAS NEOZARISTAS
El gobierno de Putin surgió de las fuerzas especiales de espionaje (ex KGB) de la potencia imperialista rusa. la fuerza tradicional es el grupo de los actuales jefes neozaristas de las fuerzas armadas.
La propaganda oficial rusa trata de salvar la imagen de Putin desacreditada por encabezar el militarismo expansionista. Ahora utiliza para este fin una supuesta “lealtad” a Stalin, para conformar a la parte del pueblo ruso que recuerda a Lenin y a Stalin y para protegerlo frente a las grandes masas de la responsabilidad de dirigir la guerra INJUSTA que se desarrolla en Ucrania. Quiere confundir al pueblo ruso y al mundo entero que la agresión a Ucrania es similar a la política de defensa de la patria de la dictadura del proletariado revolucionario aplicada por Lenin y continuada por Stalin contra los ejércitos reaccionarios de Kornilov y Denikin, y contra el ejército reaccionario que gobernaba Finlandia, e igualarlo con la política imperialista de expansión del gobierno de Krushev igual al de su ex jefe de la KGB Andropov. Putin es la cabeza de la nueva clase burguesa en el poder. Esta nueva clase es la que había destruido el gobierno de la dictadura del proletariado y desintegrado a la ex URSS después de la muerte de Stalin, en el XX Congreso revisionista del PCUS en 1956. (ex Partido Comunista de la Unión Soviética) después de la muerte de Stalin en 1953
A esta política de mentiras y deformaciones de la historia del primer Estado socialista formado por Lenin se debe la instalación de estatuas de Stalin en algunas ciudades de Rusia, a la proyección de antiguas películas de cine revisionistas y falsas y permanentes informaciones falsas sobre la anulación de la dictadura del proletariado y las calumnias contra sus jefes, y su reemplazo por una dictadura de burócratas revisionistas en el ex Estado soviético después del derrocamiento “post mortem” de Stalin por el grupo reaccionario neozarista de Krushev, del policía Beria y Cía.
Engañan a algunas personas incautas dentro y fuera de Rusia, en nuestro país y en países vecinos. Las mayor parte de las calumnias utilizadas contra Stalin son para justificar la destrucción del Estado de la dictadura del proletariado; ahora lo “reivindican” aparentemente pero utilizan errores cometidos por Stalin, durante su gobierno para atacar a dirigentes de partidos comunistas como el nuestro y a organizaciones revolucionarias. La gente que es ganada por esta propaganda está en contra de un auténtico socialismo, no es en realidad gente interesada en un cambio revolucionario sino disfrazada de demócrata
Esta política mentirosa y traicionera para confundir al pueblo de Rusia; es para dar fuerza a sus agentes en los partidos oportunistas de todo el mundo, entre ellos a agentes especiales de Cuba y de otros ex países socialistas.